Existen una serie de factores que debes considerar cuando eliges un nuevo gato. Una de ellas es si debes elegir o no un gato de raza pura y qué diferencia podría hacer esto en relación con sus necesidades y características.
La forma en que se comporta un gato depende de una combinación entre su composición genética y las experiencias a las que ha estado expuesto durante su período de sociabilización. El período es corto para los gatitos y termina alrededor de las ocho semanas de edad, aunque el gatito permanecerá receptivo a la modificación de la conducta hasta que tenga alrededor de seis meses.
Gatos con pedigrí
Los gatos de raza pura solo representan una pequeña parte de la población felina. El término "pedigrí", generalmente, se refiere al registro de la paternidad y la ascendencia del gato. Uno de los principales organismos de registro para las razas de gatos registra el pedigrí como una raza específica, lo que proporciona una garantía de conformidad con las características de la raza y el linaje del gato.
¿Deberías tener un gato de raza pura o no?
No hay una respuesta correcta o incorrecta, ya que depende de las preferencias personales. Algunas personas prefieren adoptar un gato de un refugio, lo que combina una buena acción con el placer de tener un gato.
A veces, se pueden encontrar gatos de raza pura en los refugios, ya que muchos clubes de raza también tienen un servicio de rescate para gatos de su raza que se quedaron sin hogar.
Ocasionalmente, los criadores también buscarán hogares para sus gatos retirados, aunque la mayoría de los criadores prefieren conservar a sus gatos reproductores jubilados una vez que han sido castrados.
La decisión de la existencia o no de un pedigrí influirá en la fuente probable del gato. Mientras que la mayoría de las mascotas de raza pura se adquieren de un criador, las fuentes de gatos sin pedigrí son más variadas. Las fuentes más comunes son una camada accidental de un amigo o vecino, o los refugios.
¿Por qué elegir un gato de raza pura?
Una raza se crea mediante la cruza selectiva, a fin de establecer características físicas específicas: el pelo largo, la forma de la cabeza y las orejas o la cola, por ejemplo. Esta selección también influye en el temperamento y el comportamiento. Es por esto que los rasgos de carácter de una raza individual están, generalmente, bien definidos. Es mucho más difícil adivinar el temperamento de un gatito adoptado o rescatado, y los fanáticos de los mestizos te dirán que esto es parte de su encanto. La mayoría de los amantes de los gatos de raza pura son atraídos no solo por la belleza del animal, sino que también por su carácter.
Por ejemplo, se sabe de sobra que el Ragdoll es un gato relajado y silencioso, que se adapta tranquilamente a los nuevos hogares; los gatos del Bosque de Noruega tienen un carácter sociable, lo que los convierte en excelentes mascotas para los niños; mientras que los gatos Orientales son más exigentes con el tiempo de sus dueños y forman vínculos muy fuertes con sus compañeros humanos. Conocer las características y las necesidades de cada raza pura te ayudará a elegir al gato que mejor se adapte a tus expectativas.
En la actualidad, el Ragdoll, el Maine Coon y el Bengala parecen ser particularmente populares. En los últimos años se produjo una explosión de nuevas razas con características físicas muy específicas, como el Esfinge sin pelo, el Rex de pelo suave y rizado, y el Manx sin cola.
Querrás elegir una raza cuyo aspecto te atraiga, pero, lo más importante es que exista la probabilidad de que el temperamento y el comportamiento de la raza sean adecuados para ti. Para obtener más información sobre las características y necesidades únicas de las razas de gatos, visita nuestro buscador de razas o asiste a una exposición de gatos y conversa con los criadores.