¿Por qué tu cachorro no quiere comer?
Alimentar a los cachorros suele ser una tarea fácil, porque la mayoría de ellos devoran todo lo que se les ofrece. Pero si un cachorro no come su alimento, puede haber algún motivo de preocupación y las razones pueden ser diversas. Algunos cachorros pueden tener problemas dentales, por ejemplo, un diente roto. A otros les pueden gustar tanto los premios que esperarán a que se los des como si fuera la comida.
Si tu cachorro evita su plato durante una comida, es probable que no sea nada importante. Pero los cachorros no deberían pasar más de 12 horas sin comer; de lo contrario, los niveles de azúcar en la sangre podrían bajar. Las razas pequeñas y toy (como los pomeranian y los malteses) tienen un metabolismo más rápido que los perros grandes (por ejemplo, los cocker spaniels o los dálmatas), por lo que están más expuestos a tener un descenso en los niveles de azúcar.
Sin embargo, cada perro es único, incluso dentro de la misma raza, y los cachorros no tienen las reservas de grasa que tienen los perros adultos.
Así que, si tu cachorro ha ignorado el tazón de comida por segunda vez, lo conveniente es que consultes al veterinario. ¿Cuáles son los hábitos de alimentación normales y cómo puedes crear hábitos de alimentación saludables en tu cachorro?
Los hábitos de alimentación de tu cachorro
Establece un horario regular para alimentar a los cachorros con alimentos equilibrados desde el punto de vista nutricional. Esto ayuda a garantizar que el cachorro reciba la nutrición adecuada para una vida adulta sana. También es más probable que adquiera hábitos de alimentación saludables.
La etapa neonatal, de 0 a 4 semanas
Los cachorros recién nacidos reciben una nutrición completa para mantener su organismo en crecimiento. La leche materna proporciona cierta protección inmunitaria. A medida que crecen, sus necesidades nutricionales cambian.
Etapa de destete, de 4 a 6 semanas
Cuando el cachorro abre los ojos, puede explorar su entorno y jugar con sus hermanos. También puede interesarse por la comida de su madre. Esto ocurrirá aproximadamente cuando el cachorro tenga entre cuatro y seis semanas. Es el momento de iniciar el proceso de destete.
Durante el destete, el cachorro puede comer alimento húmedo o seco ablandado con agua, hecho puré. Muchos cachorros comen de forma independiente a las 8 semanas. El alimento debe ser completo, desde el punto de vista nutricional para fortalecer su sistema inmunológico en desarrollo y contribuir al crecimiento del organismo.
Cachorros a partir de 8 semanas
A las ocho semanas, tu cachorro come de forma independiente y es lo bastante maduro como para dejar a sus compañeros de camada por sus nuevas familias. Todo es nuevo y desconocido en el nuevo entorno del cachorro. Hay nuevos hermanos perros y gatos, miembros de la familia alborotadores y nuevas normas y rutinas. Si se tiene en cuenta el punto de vista del cachorro, es comprensible que su apetito se vea alterado y razón de más para descartar cualquier problema de salud visitando al veterinario.
Este es también el momento en que los dueños inician el adiestramiento de su cachorro. Los premios de adiestramiento son deliciosos; tu cachorro podría preferirlos lo suficiente como para asumir que obtendrá más premios si ignora el tazón de comida. Esos premios no cubrirán las necesidades nutricionales de tu cachorro y deben utilizarse exclusivamente para el adiestramiento (y siempre deben tomarse de la porción diaria de comida de tu perro). Si se mantiene la constancia, los cachorros aprenderán rápidamente cuándo esperar esos deliciosos premios.
Razones por las que tu cachorro no quiere comer
Como dijimos anteriormente, los cachorros deben comer varias veces al día. Si ignoran la comida durante 12 horas, es momento de consultar al veterinario para descartar problemas de salud. Si todo está bien, estos son algunos de los motivos más frecuentes por los que tu cachorro puede rechazar el tazón de comida.
Tu cachorro puede ser exigente con la comida
Algunos perros son más exigentes y encontrar el alimento perfecto puede ser todo un reto. Pero los cachorros, sobre todo los labradores, tienen fama de intentar comerse todo lo que les parece interesante. Si tu cachorro no come, hazte un par de preguntas:
- ¿Tu cachorro se devora con avidez los premios de adiestramiento y luego ignora el tazón de comida?
- ¿Tu cachorro te pide comer de tu comida o recibe demasiados premios entre comidas?
- ¿A tu cachorro le están saliendo los dientes?
Hay maneras de fomentar hábitos de alimentación saludables en tu comensal exigente. Prueba cambiar el alimento. Puedes añadir un poco de agua para ablandarlo mientras es pequeño. Si decides cambiar el alimento del cachorro, consulta a tu veterinario si es una buena idea para tu perro y pregúntale cómo hacer la transición a un nuevo alimento. Puedes considerar variar las texturas dándole alimento seco y húmedo, ya sea de forma separada o mezclados.
La transición de un alimento a otro diferente debe durar unos diez días. Vigila cualquier señal de malestar estomacal. Si tu cachorro presenta malestar estomacal, vómitos o síntomas de diarrea, vuelve al paso anterior y aumenta el tiempo de transición entre pasos.
Cronograma para cambiar el alimento
Ofrece premios únicamente durante el adiestramiento si tu cachorro los está esperando. De este modo, aprenderá cuándo esperarlos.
Evita ofrecerle comida para humanos. Los cachorros pueden rechazar su comida y esperar a que les den más de tu comida. Los alimentos para humanos no satisfacen sus necesidades nutricionales y pueden contener ingredientes que les causen enfermedades, así que limítate a ofrecerle comida para cachorros y premios solo durante el adiestramiento. Los premios nunca deben formar parte de la porción diaria de alimento de tu cachorro.
Entre los cuatro y los seis meses, tu cachorro empezará a perder dientes. Los dientes de leche se caen para dejar espacio a los dientes adultos. Este proceso puede ser incómodo, doloroso y hacer que el cachorro evite comer o masticar (como sucede con los bebés humanos). Los problemas dentales, como un diente agrietado o un trozo de planta o madera atascado entre los dientes (¡estos pequeños son aventureros!) también causan dolor.
Para aliviar el dolor cuando al cachorro le están saliendo los dientes, ofrécele diferentes texturas y tipos de juguetes para masticar. Los masticables comestibles o los juguetes refrigerados para cachorros también pueden aliviar las encías irritadas.
Tu cachorro ha dejado a sus compañeros de camada y a su madre para incorporarse a su nueva familia. Adaptarse al nuevo entorno y a nuevas vistas, sonidos, personas y mascotas puede causarle estrés. La ansiedad por separación (porque extraña a su madre o hermanos) o la adaptación a un nuevo entorno pueden alterar el apetito del cachorro. Las señales a las que debes prestar atención son jadeo, temblores, cola u orejas caídas, bostezos o lamerse los labios. Un cachorro estresado también puede mostrar un mal comportamiento, como ensuciar la casa o comportarse de forma agresiva.
Algunas ideas para reducir el estrés o la ansiedad del cachorro son:
- Ejercita a tu cachorro una hora antes de comer. Esto lo calmará y le abrirá el apetito.
- Cambia el lugar donde come. Un espacio tranquilo, alejado del ruido, de los miembros activos de la familia y de otras mascotas (incluso del gato) puede ayudar a calmar la ansiedad. Algunos cachorros prefieren comer en su jaula y se sienten más seguros en ella.
- Si te preocupa el estrés de tu cachorro o necesitas más consejos, consulta a tu veterinario para que te dé ideas para que la transición sea lo más fluida posible.
Cuando hace calor, los perros prefieren comidas más livianas que en los meses más fríos. Necesitan menos energía para que sus sistemas corporales funcionen. La falta de apetito por esta causa temporal suele resolverse por sí sola cuando el clima refresca.
- Dale de comer al cachorro durante las horas más frescas del día y mantenlo bien hidratado. Un cachorro deshidratado puede enfermarse rápidamente.
- Si le das demasiado alimento o le ofreces muchos premios entre las comidas, es posible que tu cachorro no tenga hambre.
- Establece horarios de comida regulares para tu cachorro y evita la alimentación libre para incentivarlo a que se termine su comida. Esto también le ayudará a regular cuándo necesita ir al baño.
- A la hora de la comida, dale a tu perro 20 minutos para que coma y recoge los restos de alimento; así aprenderá a comer durante las comidas y se le abrirá el apetito entre ellas.
- Para evitar sobrealimentarlo, sigue las pautas indicadas en el empaque del alimento y, por supuesto, habla con tu veterinario si no estás seguro de cuánto debe comer tu cachorro.
Los premios deben ser ocasionales (y deben descontarse de la porción diaria de croquetas) hasta que se estabilice la ingesta de alimentos del cachorro.
Es posible que los cachorros de menos de seis semanas aún no puedan comer puro alimento sólido. Lo ideal es que permanezcan con su madre. Si se trata de un cachorro huérfano, consulta al veterinario sobre la salud y necesidades nutricionales durante el destete y la incorporación de alimentos sólidos.
Es posible que un cachorro que está enfermo, siente dolor o tiene problemas dentales no quiera comer. La consulta temprana con el veterinario, si el cachorro se niega a comer durante 12 horas, puede ayudarte a detectar de inmediato si algo anda mal.
Cuándo buscar atención médica si tu cachorro no come
Consulta al veterinario si tu cachorro lleva 12 horas sin comer. Hará que tu cachorro vuelva a la normalidad o detectará algún posible problema, además de tranquilizarte.
- Si tu cachorro tiene diarrea o vómito (los cachorros pueden deshidratarse con rapidez)
- Observas sangre en sus heces o está vomitando
- Disminuye su energía
- Otros cachorros de la camada se han enfermado
- Sabes que tu cachorro ha comido algo inapropiado
- Observas que la marcha es anormal, tiene pérdida de energía, debilidad o convulsiones. Estos síntomas podrían indicar que el cachorro tiene hipoglucemia. Los perros de razas pequeñas y toy son muy susceptibles a este problema
Como puedes ver, los cachorros pueden rechazar la comida por muchas razones. No siempre es un problema importante. Pero si crees que algo anda mal, haz una visita al veterinario para que examine a tu cachorro.
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