Todo lo que necesitás saber: ¿por qué rascan los gatitos
Entender a tu gatito y aprender más sobre por qué los gatitos rascan también te permitirá identificar la diferencia entre un comportamiento de rascado normal o que podría ser motivo de preocupación.
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Entender el comportamiento de rascar de los gatitos
Rascar es un comportamiento felino instintivo y, como tutor, debes asegurarte de que el entorno satisfaga las necesidades de rascado de tu gatito. Para lograrlo, es útil conocer las razones detrás del comportamiento de tu gatito.
¿Por qué rascan los gatitos?
En los gatitos, rascar y estirarse (que suelen ir juntos) son hábitos felinos normales que les ayudan a mantener sus uñas y a trabajar los músculos de sus extremidades y columna vertebral, manteniéndolos en buena forma física. También desempeñan un papel en que los gatitos marquen el territorio y se comuniquen con otros gatos.
Algunos datos sobre las uñas de los gatitos:
- Las uñas de los gatitos están hechas para trepar.
- Sus uñas delanteras suelen ser más afiladas.
- Las uñas de los gatos son retráctiles(escondidas bajo la piel y el pelo y extendidas según sea necesario).
- Pueden usar las uñas para su propia defensa cuando sea necesario.
- Un gatito estirado equivale a que está plantando sus uñas delanteras y arrastrándolas por una superficie horizontal o vertical.
- El movimiento de rascar elimina la capa externa de la uña y revela una nueva capa afilada debajo.
- A medida que las uñas se estiran y cavan, las glándulas odoríferas y sudoríparas entre las almohadillas de las patas se mezclan y depositan un olor específico que pueden detectar otros gatos.
¿Qué te dice el comportamiento de rascado de tu gatito sobre sus emociones?
Estirarse y rascar, que a menudo van juntos, se extienden más allá de lo meramente físico, ayudando a los gatitos a marcar su territorio y transmitiendo pistas sobre las emociones y el estado mental de tu gatito. Observar cuidadosamente sus hábitos a la hora de rascar debería proporcionar pistas para comprender el comportamiento de tu gatito.
Rascar como una señal de malestar
Comprender el comportamiento de los gatitos en general y lo que pueden estar comunicando (y comprender a tu gatito en particular) es esencial como tutor de una mascota.
En algunos casos, el comportamiento de rascado puede ser una señal de que tu gatito tiene dolor o está asustado. Vos conocés mejor a tu mascota: si constantemente arremete para rascar cuando se toca una zona concreta de su cuerpo, eso podría ser un signo de dolor, lo que amerita una visita al veterinario.
Si siempre parecen rascar mucho en una parte de su casa o alrededor de una persona (o animal) en particular, pueden estar inquietos o nerviosos.
El comportamiento de rascado puede ser diferente para los gatos de exterior y de interior
Si tu gato se aventura al aire libre, es probable que, con sus uñas, rasque la corteza de los árboles, los postes de las vallas u otras superficies adecuadas y las adorne con su olor único. Se trata de marcar el territorio como forma de comunicarse con otros gatos.
Si bien el comportamiento de los gatitos al rascar puede deberse en parte a enviar mensajes a otros felinos, en el caso de los gatos de interior también puede proporcionar información a sus tutores humanos.
Un gatito aburrido o sin estimulación adecuada puede empezar a rascar más de lo que lo hacía antes. A medida que vayas conociendo a tu mascota, te acostumbrarás al nivel de rascado que es normal en él.
Para los gatitos, que aún están aprendiendo sobre el mundo, rascar y golpear con sus patas también son parte del juego, pero tendrás que ayudarlos pacientemente a aprender a no golpear y arañar los dedos humanos.
El comportamiento de rascado y las necesidades de ejercicio de tu gatito
Tu gatito no necesita que lo pasees como a un perro, pero el ejercicio sigue siendo importante y rascar es una parte importante de él. El gatito se estira y rasca, el comportamiento es instintivo. Extienden las patas delanteras, flexionando los músculos, cuando rascan. Si tu gatito se aventura al exterior, naturalmente cuidará de sus uñas y trabajará sus músculos mientras trepa árboles, escala vallas y se lanza en busca de… bueno, cualquier cosa que se mueva en realidad.
Algunos de los mejores tipos de ejercicio para los gatitos son jugar y trepar. Si tenés espacio en tu casa, un rascador alto ayudará a mantener a tu gatito en forma y activo, además de darle un lugar divertido en el que seguir su instinto de rascado (a la vez que preserva tus muebles), incluso si no tiene acceso al exterior.
Los gatos a menudo aprecian un punto de observación alto. Pero darle a tu gato una posición desde la que observar el mundo no es la única razón para comprar un rascador alto. Cuando los gatitos se estiran, el movimiento ejercita sus extremidades delanteras y su columna vertebral, lo que ayuda a mantenerlos en buena forma física, por lo que es buena idea tener una superficie para rascar que les dé el lujo de estirarse.
Cuidado de las uñas de los gatitos: una guía práctica
A medida que tu gato crezca, tendrás que prestar más atención a sus uñas. Los felinos mayores suelen ser menos flexibles: deberían tener acceso a un rascador para gatos, pero puede que necesiten ayuda para cuidar sus uñas, especialmente si viven en interiores.
Este es el momento en el que te alegrarás de haber acostumbrado a tu mascota al cuidado de las uñas de los gatitos a una edad temprana (sin mencionar el hecho de haberte acostumbrado a cortarlas vos mismo). Deberías revisar sus uñas con regularidad para asegurarte de que no han crecido demasiado y de que no perforan las suaves almohadillas, lo que puede provocar abscesos.
Cinco consejos para empezar con el cuidado de las uñas de tus gatitos
- Conseguí el equipo adecuado: el cuidado de las uñas de los gatitos implica cortaúñas especiales (tu veterinario puede aconsejarte si es necesario)
- Elegí tu momento: esperá a que tu gatito esté tranquilo
- Cortá suavemente solo la punta de las uñas de tu gatito
- Tené cuidado de no cortar demasiado: si cortás la parte rosa de la uña de tu gatito, probablemente sangrará
- Tenés que saber cuándo pedir ayuda: si tu gatito está demasiado estresado por la experiencia, tal vez sea mejor llevarlo a un veterinario o a un peluquero profesional
Cómo adiestrar a tu gatito respecto al comportamiento de rascado
Si bien es normal el comportamiento de rascado, y tu objetivo no debe ser eliminarlo, tu gatito necesita aprender a vivir en armonía con vos y con cualquier otra mascota. Seguir estos consejos de adiestramiento para gatitos debería ayudar a mantener no solo las uñas de tu gatito, sino también tus muebles (y tus dedos) en buen estado.
Los mejores consejos de adiestramiento con refuerzo positivo
Si dejás que tu gatito te muerda y arañe las manos cuando es pequeño, te costará que deje ese hábito cuando sea mayor.
Aseguráte de que tu gatito tiene muchos juguetes para empujar con su patita de un lado a otro y de que dedicás suficiente tiempo a jugar con él. Un gatito aburrido o sin estimulación adecuada es más propenso a rascar en exceso.
Si tu gatito empieza a golpearte con las uñas extendidas, distráelo con un juego más adecuado o dejá de interactuar brevemente con él. Una vez que se haya calmado, podés reiniciar la sesión de juego o hacerle un mimo.
Cuando tu gatito lo haga bien, hacéselo saber, con elogios, un mimo, más tiempo de juego o incluso un premio, como croquetas o alimento húmedo incluídas dentro de su ración diaria. Tené siempre en cuenta las emociones de tu gatito. El refuerzo positivo le ayudará a aprender. También reforzará el vínculo especial que vos, como tutor, compartís con tu mascota.
Puede que tu gatito aprecie más una pelota rascadora para gatos, un bloque de rascar plano u otros juguetes para rascar que un rascador convencional para gatos.
Si tu gatito tiene la costumbre de rascar el sofá, colocá cerca un rascador; si le atrae un tejido rugoso en particular, elegí un accesorio para rascar de textura similar. Cubrí o reubicá cualquier objeto que esté prohibido rascar y que tu gatito encuentre demasiado tentador.
Elegí un rascador resistente para tu gatito que no se tambalee ni se caiga y que sea lo suficientemente alto como para que se estire mientras rasca (o un panel rascador bien sujeto).
Si has probado todo esto y tu gatito sigue rascando de forma problemática, hablá con tu veterinario o con un especialista en comportamiento de mascotas para obtener consejos personalizados.
Una vez que tu casa esté equipada y tu gatito se haya acostumbrado a su entorno, sus buenos hábitos a la hora de rascar deberían durar toda la vida (aunque, por supuesto, tendrás que cambiarle el rascador de vez en cuando).
Con la información, el equipo y la preparación adecuados, podrás ayudar a tu gatito —y más tarde a tu gato— a mantener sus uñas en buenas condiciones. Se trata de una parte importante de su salud y bienestar general, además de que los ayudarás a aprender buenos hábitos a la hora de rascar que beneficiarán a toda la familia.
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